Morata de Tajuña: La cementera de Portland Valderrivas, grupo propiedad de la multinacional FCC, aumenta su emisión de contaminación en un 729%.
El monopolio español de la producción de cementos, Portland Valderrivas, en su planta de Morata ha aumentado las emisiones contaminantes de dioxinas y furanos en un 729'56%, y de metales pesados en un 15,49%.
Esto viene provocado por la sustitución del combustible utilizado en el horno, coque y fueloil, por residuos como plásticos, maderas y restos animales y vegetales. Así, se aseguran un buen aumento de sus beneficios. Por supuesto, con el permiso de la Comunidad de Madrid, que ejerce como consejo de administración de los monopolios.
Pero, ¿quién sufre las consecuencias? Quien seguro que no las sufre es Esther Alcocer Koplowitz, que ostenta la mayor parte de la propiedad de FCC.
Quienes sí sufrimos las consecuencias son los/as trabajadores/as de la planta, en primer lugar, y los habitantes de Morata de Tajuña, Arganda y todo el sureste de Madrid, auténtico vertedero y zona de alto riesgo de la Comunidad.
Ante esta situación, solo hay una posibilidad: la organización de los obreros y obreras en favor de sus intereses, por la socialización de los medios de producción, por supuesto también de FCC y Portland Valderrivas. Solo así podrán ser atendidas las necesidades del conjunto de la clase obrera, y no los intereses de explotación y máximo beneficio de una minoría de la población.
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